Una persona que hace deporte de forma asidua debe mantener una nutrición determinada. Influye en su rendimiento deportivo, así como en su propio estado de salud a nivel general.
Entre otras sustancias la alimentación de una persona deportista debe consistir en hidratos de carbono, proteínas, grasas saludables, vitaminas, minerales, antioxidantes, fibra y también agua.
“Todas ellas son esenciales para proporcionar la energía y los sustratos imprescindibles para el crecimiento y la actividad física”, remarca en ‘Come bien. Juega Mejor’ (Amat Editorial) la doctora en alimentación y nutrición Laura Isabel Arranz.
Se trata de un manual dirigido a padres de jóvenes que realizan deporte, en el que destaca los 8 principales alimentos para un joven deportista que detallaremos a continuación, aunque tal y como confiesa en una entrevista con Infosalus, son aplicables también al público adulto, porque “lo que es sano, lo es para todos”.
“Únicamente que puede variar un poco la
recomendación en función de la edad y del peso corporal. Hay que tener en cuenta también que los jóvenes de ahora no comen pan en las comidas, porque se ha perdido esa costumbre muchas veces en las familias, que ni compran pan. Por eso he destacado el pan como una opción de aportar hidratos de carbono”, defiende la también farmacéutica y dietista-nutricionista.
En este contexto, Arranz destaca que la nutrición deportiva también debe perseguir el disminuir el impacto del cansancio, reducir el riesgo de enfermedades y lesiones, y permitir una recuperación más rápida.
“Es esencial seguir una dieta bien equilibrada que contenga cantidades adecuadas de macronutrientes (proteínas, hidratos de carbono o carbohidratos y grasas) y micronutrientes (vitaminas y minerales), pero también hay que tener en cuenta otros aspectos como los horarios para tomarlos o la forma de cocinarlos”, advierte.
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